6 claves del éxito como profesional del derecho penal
Podemos definir al derecho penal como una rama o área del derecho, a la que se le es encomendada la función de regular, concebir y normar las capacidades de castigo, o punitivas, capacidades resguardadas para las personas que incumplan leyes o normas de conducta preestablecidas.
En todo el mundo hay una inmensa cantidad de profesionales, abogados y juristas especializados en el derecho penal, y es que, esta es una profesión que se extiende cada vez más, debido a esto, si deseas especializarte en el derecho penal o ya has terminado tus estudios, y deseas destacar entre los demás abogados, la información que te compartiremos aquí te será de suma utilidad. A continuación, te sugerimos una serie de aspectos claves, para que logres desarrollarte como un profesional y le des un valor agregado a tus servicios.
Piensa en ti como tu marca personal.
La abogacía es una carrera en la que el servicio y la impresión que das a tus clientes es lo más importante, ya que, sin clientes no ejerces tu profesión. Si quieres impulsar tu carrera en esta área, necesitas pensar en ti mismo como si fueras una marca personal, esto lo puedes lograr, proporcionando servicios excelentes, teniendo una buena presentación, prestando una admirable atención al cliente y desarrollando tu trabajo de forma profesional.
Si logras esto, no solo atraerás a más clientes, sino que también les proporcionarás una excelente experiencia con tu servicio. Nada habla mejor de tu trabajo que tus clientes satisfechos, además, ten por seguro que si alguno de ellos tiene la oportunidad de recomendarte lo hará, porque está seguro de que tu servicio es de calidad.
Nunca dejes de actualizarte
La formación es una parte importante que todo profesional debe tener en cuenta, quizás llevando a cabo un Máster en Derecho penal o especialización en alguna rama del derecho.
Tal vez llegues a creer, que una vez termines tus estudios universitarios y te gradúas, solo tendrás que preocuparte por trabajar y conseguir clientes, y de cierta forma, es verdad, sin embargo, todas y cada una de las profesiones se reinventan, modernizan o se le agregan cosas nuevas con el paso del tiempo, y si bien la frecuencia con la que esto pasa depende de la profesión, la abogacía no es una excepción. Asegúrate de estar siempre al pendiente de los cambios que se producen en las áreas que ejerces y proporcionar el servicio más moderno y fácil de usar a tu cliente.
Los profesionales exitosos y reconocidos, se encargan constantemente de mejorar sus habilidades, haciendo postgrados, especializaciones, maestrías o incluso pequeños cursos. Ten por seguro que todo eso valdrá la pena y se notará una mejora en la calidad de tu desempeño, y que, además, se notará en el flujo de clientes, porque algo indiscutible es que una persona siempre buscará al abogado mejor preparado que pueda costear ¡Asegúrate de ser la mejor opción en el mercado!
Posiciónate en las redes sociales.
En el mundo actual, las redes sociales juegan un papel importante en todo, son una herramienta muy poderosa que posee un público enorme y global. En una profesión como esta, en la que los clientes y el reconocimiento son esenciales y la base de tu carrera, es imprescindible para ti posicionarte en las redes.
Con redes sociales como Twitter, Instagram, Facebook, YouTube o páginas web, tienes la oportunidad de darte a conocer, fortalecer tu marca personal y expandir tu cartera de clientes. Sin lugar a dudas, la presencia en internet es importante y sumamente beneficiosa para tu carrera, por eso debes plantearte seriamente el empezar a conocer cómo se manejan los medios sociales en los que quieres incursionar, o, por otro lado, contratar a un experto en marketing digital y redes sociales que te guíe o bien que maneje tus cuentas y las promocione.
Encuentra un lugar para ti.
En el desarrollo de tu marca, es esencial tener una oficina personal o un espacio donde trabajar que tus clientes puedan asociar a tu persona y que cause una buena impresión. Tal vez por ahora, quieres o necesitas empezar a ejercer tu profesión de forma inmediata y, tener o adquirir un espacio, se te hace bastante difícil, sin embargo, trata de mantenerlo como una meta, aunque sea a medio plazo, ya que, sin lugar a dudas, tener un espacio propio para recibir a tus clientes, te aporta profesionalismo, seriedad y seguridad, aspectos que entenderás son claves para desarrollar tu imagen.
Desarrollar y mejorar tu estabilidad emocional.
Ser estable emocionalmente y tener una personalidad segura y “resistente”, por así decirlo, te puede dar muchas ventajas a la hora de ejercer y de tratar con los clientes. Como abogado o abogada, estarás expuesto a todo tipo de personas en todo tipo de situaciones, muchas veces tendrás que soportar malas actitudes, sobrellevar a tus clientes de forma profesional e incluso escuchar insultos o amenazas, todo esto puede pasar en un juicio o en una simple reunión con tu cliente, es parte de tu profesión, y es algo que debes aprender a manejar con seguridad en la medida de lo posible.
Manejo de idiomas
Aunque solo tengas intenciones de desarrollarte en un área muy local, en un mundo tan globalizado como este, nunca está demás manejar un idioma aparte del propio, preferiblemente el inglés. Por otro lado, si quieres convertir tu marca en un servicio empresarial, a nivel nacional o global, aunque sea un plan a muy largo plazo, el manejo mínimo del inglés y otros idiomas como el chino mandarín, francés o alemán, serán cruciales para ti.
Además, esto te da una mayor capacitación, preparación y te distingue de los otros abogados, cosa que, como te ha sido mencionado anteriormente es esencial, porque te proporciona una característica distintiva, de la que puedes sacar provecho para dar una imagen más profesional o inclusive con fines publicitarios.Siguiendo las pautas y consejos que te proponemos, con un poco de perseverancia y seguridad, de seguro lograrás tus objetivos, te harás con una reputación, una marca personal conocida y poco a poco conseguirás ampliar tu cartera de clientes y expandir el alcance de tus servicios. Recuerda que la clave siempre es la paciencia, la constancia y las ganas de lograr tus metas.